Joder qué pesados son los anticasillas. Han conseguido su objetivo, que era quitarse de en medio al mejor portero de la Historia y todavía siguen inundando las redes sociales, las webs de los periódicos y los mensajes de las televisiones con sus diatribas cargadas de un rencor incomprensible. Coño, que uno les ve y les oye y pareciera que Íker les hubiera estafado, les hubiera mentado a la madre o les hubiera robado a la novia. Ellos ahí siguen. Con lo que les ha costado; no fuera a ser que se retirara en el Madrid con todos los honores un hombre que es una leyenda con 34 años.
En esta marea de rencor y mala baba contra Íker han ayudado sobremanera dos personas que han hecho un tremendo daño a la imagen del Real Madrid de los últimos años. Uno de ellos, gracias a Dios, ya no está entre nosotros. Vaya, no quiero decir que haya muerto, que no le deseo que fenezca, sino que ya no se sienta en el banquillo que incendió durante 3 larguísimos años. Los que me conocen ya saben que hablo de José Mourinho. Uno de esos errores inexplicables lo aupó a la dirección técnica del Madrid y le permitió abrir una brecha de mala leche en la afición y llevar la relación entre Madrid y Barça a un enfrentamiento infantil casi sin retorno, sencillamente, porque el Barça de Guardiola volvía loco a este histrión del fútbol que se autodenominaba “The Special One”, que ya hay que ser mentecato. Íker nunca le siguió la corriente y tuvo la desfachatez, entre otras cosas, de buscar vías de conciliación con sus compañeros del Barça, y el papanatas le puso proa y no paró hasta destruirlo.
Dicen mis amigos Mourinhistas y/o anticasillas, que Íker ya no estaba en forma, que ya no era determinante, que había perdido la confianza… Coño. Me gustaría verles a ellos en sus empresas con un jefe diciéndote todo el día que no eres el mejor, que hay otro (pasó con el pobre Adán o con Diego López) que es mejor que tú. Lo que le ha sucedido a Íker en el Madrid se ha llamado de toda la vida “lestánputeando” y ahora se denomina “mobbing”. Lo terrible es que en ese puteo y en esa absurda persecución al portero, hubo muchos cómplices entre la prensa, en el público del Bernabéu y uno, el principal, en el Palco.
Florentino jamás quiso a Íker. Nunca le pareció portero para el Madrid y, desde que él llegó a la presidencia, cada verano, sonaban nombres de posibles ocupantes de la portería madridista y es sabido que para el Presidente la opción siempre fue Buffon. Pero claro, llega Íker y es el héroe en la Novena. Y luego se va al Mundial de Corea y es el héroe de España, aunque nos eliminaran en cuartos. Y a ver quién lo quitaba. Pero es que luego va Casillas y gana la Eurocopa y el Mundial con actuaciones milagrosas que le reconfirmaron indudablemente como el mejor portero, no del mundo, sino de la Historia. Y Florentino se lo tuvo que comer. Y eso que él no lo soportaba. Íker es de Móstoles y Florentino nunca le hizo una oferta mareante en una servilletita de papel. El guardameta jamás tuvo que mentir diciendo que su “sueño desde niño” fue jugar en el Madrid porque, desde que cambió los dientes, fue portero del Madrid. Casillas no lleva veinticinco tatuajes, ni se depila, ni luce peinados de la señorita Pepis. Por si fuera poco, no está representado por el tal Mendes, ni se mueve por la vida como si fuera una estrella de rock con almorranas; a pesar de ser un mito, Íker sigue siendo un tío normal, majo, educado y, con frecuencia, sonriente. Llevó su calvario de los últimos años en silencio, no se recuerda un solo altercado en su carrera, jamás un mal gesto, pero los mourinhinstas y/o anticasillistas repiten el mantra que creó el Special One y lo califican como topo, mal profesional y mal compañero y un portero acabado.
La cuestión es que toda esta acumulación de mierda ha concluido, como saben, con la salida de Íker del Madrid. Y, ni siquiera en la despedida, Florentino ha sido capaz de tener algún gesto de grandeza con el mito. Íker se va porque no se le quiere. Porque este presidente al que se le llena la boca de leyendas, grandeza, estilo y Madridismo, ha desaprovechado a la mayor leyenda que ha dado el madridismo en los últimos 50 años y ha permitido que Mourinho primero y, quien viniera, después, provocara que, el que debería haber sido su Gran Capitán hasta la retirada, se haya ido hastiado al Oporto. Si este obseso del marketing y las camisetas hubiera sabido aprovecharlo, podría haber estado vendiendo camisetas de Íker hasta dentro de otros 50 años. Pero no. Le han hecho una despedida deprisa y corriendo, improvisada y le han prometido que aprovecharán una pachanga veraniega para darle un homenaje. Y hasta el último minuto Florentino dejó claro que ese que tenía al lado no es de los suyos y tuvo el humor de decir que “Íker se va porque así lo ha querido”. Pues, ni siquiera en ese momento, le salió a Íker ese orco que todos llevamos dentro. Creo que a mí me pilla ahí en medio y le hago al Presidente un corte de mangas de esos de llegar al Oporto con una luxación de codo de grado 3. Pero este muchacho sí que es, de verdad, un tipo especial y prefirió comportarse de manera caballerosa y no mandar a la mierda a Florentino. He visto y leído muchas cosas sobre Íker. Quizás la mejor sea la viñeta que le dedicó otra leyenda, pero del humor gráfico. Forges captó como nadie con tres dibujos y 5 frases la esencia del asunto. Amén.
¡Qué acertado estás hoy, Chiflis!
Yo llevo tiempo diciendo que el gran cancer del Madrid del s XXI es Florentino Pérez, que Dios confunda.
Hasta que este individuo no se vaya el Madrid no levantará cabeza. Podrá ganar titulos, pero a costa de ir sembrando el camino de cadaveres de sus propios hijos. Y seguirá ganándose a pulso el desafecto de mucha gente por una gestión horrible de las personas.
Y ya hablando de porteros, yo que Keylor Navas me iba del Madrid, porque le van a tener calentando el banquillo 10 años.
Y Benítez que se prepare, porque su futuro es el mismo que el de Ancelotti. Osea, ser defenestrado a la primera de cambio.
En fin, qué pena.
Gracias, Copi. Lo peor de Florentino, no es eso del maltrato a los futbolistas y una gestión que piensa en lo cósmico. Para mí el principal problema es que ha convertido el Madrid en una oligarquía en la que sólo puede llegar a presidente él y 3 ó 4 colegas suyos multimillonarios. Ves las elecciones del Barça y da envidia ver que hay 4 candidatos. En el Madrid, si hay próximas elecciones no creo que pueda haber muchos. Y, desde luego, ninguno como Santiago Bernabéu. Si hoy viviera, don Santiago no habría podido presentarse a las elecciones del club que llevó a lo más alto porque no es multimillonario. Y, cuando se aprobó esto de la oligarquía, allí estaban todos los socios compromisarios aplaudiendo llenos de fervor florentinista. Es un genio. Y Benítez, pues ojalá me equivoque, pero huele a cadáver desde antes de empezar. Un abrazo
Hola Carlos, como siempre, estas muy acertado.
Quizás porque Iker como dices es normal, es persona que no personaje. Admiro su discreción, su sonrisa en los malos momentos y esa cara de buena persona. A la buena gente se la ve venir por su rostro, su semblante sobre todo, lo mismo que al malo, aunque éstos últimos a veces te sorprenden.
No me entusiasma el fútbol, pero a estas alturas ya he visto unos cuantos partidos especialmente de la selección. Y además de ver a Iker hacer paradas grandiosas, se respiraba entre los jugadores buen rollito. Bueno de eso sabrá más Sara Carbonero que primero estuvo sólo de periodista entre vestuarios y campo y desde aquel apasionado beso a lo que yo aplaudí, sonreí y me emocioné, salió mi vena romántica. Por cierto, lo que decía antes, normales, guapos pero normales y eso quizá molesta a personas como Florentino, que le va más jugadores con multas, escándalos, broncas, coches de un lujo grotesco y pelos de desfile de Llongueras.
Mal no, muy mal me parece cómo ha tratado el Club a Iker; ya me parecio fatal que en su dia no ganara la bota de oro y se la repartan siempre los mismos.
El tiempo casi siempre pone a cada uno en su sitio. Le deseo un gran futuro a un gran jugador y buena persona.
Un abrazo Carlos.
Gracias, María. Lo de tratar mal a los de la cantera no sólo pasa en el fútbol; también sucede en las televisiones y me imagino que en cualquier empresa. Pero el problema con Íker es no entender que es una leyenda mundial. Es un jugador que, en su posición, ha ganado muchísimas más copas que ningún otro y que ha dado gloria a España y al Real madrid como para que Florentino le hubiera mostrado la misma veneración que siente por Bale, Ronaldo, o la que sintió por Mourinho. Si Florentino hubiera querido de verdad a Íker, no habría perdido la titularidad, no habría permitido que Mou dijera tantas gilipolleces y no habría dejado que se hubiera ido, no por la puerta de atrás, sino por la de la alcantarilla. Un abrazo
No se puede explicar mejor. Suscribo literalmente todo lo que dices. En cualquier caso, y a mi juicio, esto no hace más que enfangar a Florentino y encumbrar a Iker.
Yo me quedo con una de sus frases de despedida : «…más que recordarme por ser buen o mal portero, sólo espero que la gente se acuerde de mí por ser buena persona.»
Eso no creo que nadie pueda discutirlo.
Gracias, María. Depende de con quién hables; para la prensa pro-Florentino (que es numerosa) es un gran líder que marca el camino con clarividencia… Lo de que Íker es buena persona, afortunadamente parece que queda claro. Besos.
No soy aficionada al fútbol aunque si me informo y procuro estar al día de lo que ocurre en ese y en todos los mundillos.
Cuando don Vicente del Bosque, hoy en día marqués, era entrenador del Real Madrid y llevó al equipo a grandes victorias, Florentino (que se cree descendiente de la pata del Cid), lo echó porque, según él, don Vicente no tenía clase. Pues don Vicente ha llevado a la selección española a sus mayores triunfos, incluido el mundial cuya copa levantó precisamente Casillas y su bonhomía y sencillez nos han conquistado a todos. Florentino, a pesar de llevar gafas, no vio claro a quien llamaba desclasado, al hombre que, a base de trabajo y esfuerzo llevó a la selección a lo más alto y que hoy es reconocido y querido por el mundo entero. Y con Casillas, lo mismo: ¿cómo puede tratar así al mejor portero que ha tenido el Madrid? ¿cómo puede despreciar el trabajo bien hecho, la lealtad, la entrega? Se me ocurre una respuesta: Florentino presuntamente no conoce el significado de esas virtudes y por eso las desprecia. Me quedo con una «gran duda»:¿qué es lo que tiene Florentino dentro del cráneo además de los símbolos del dólar?
Gracias, María. Lo malo es que los que odian a Casillas y/o defienden a Mou son los mismo que piensan que del Bosque es un «mata» y que todo lo bueno que le ha pasado a la selección es porque estuvo Luis Aragonés. Florentino es un tío muy listo y ha hecho muchas cosas buenas, pero le pasa como a muchos grandes hombres de empresa y estadistas, que están tan rodeados de pelotas que les dicen a todo que sí, que acaban perdiendo el contacto con la realidad.
Un abrazo
Nunca tan de acuerdo contigo, como con esta «cabra».
Florentino, creo no sabe lo que perdió, al mejor portero del mundo.
Para mí ya cayó algo en el «REAL Madridrid» ¡Dichoso Florentino! Nunca tendrá un guardameta tan educado y estupendo.
Ayer te hice y envié un comentario, pero veo que no llegó. ¡Lo siento!
estoy totalmente de acuerdo con todo lo que dices. La culpa la tuvo el Presidente del Real Madrid.
¿Dónde encuentra un portero mejor? Le hizo la vida imposible el tal Florentino Pérez. ¿Por qué dice que pidió el mismo Casillas marcharse?
No se admiten mentiras.
La culpa es de la defensa, de Muriño, de DiegoLo, de Vecchi, de la delantera por no meter más goles, de la estación espacial por proyectar sombra, de los idus de marzo, de keylor Navas por ser bueno, de Pedrerol, joer, hasta de Florentino
pero eso sí
nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,nunca,……
…de Casillas
Y después sale la entrevista de los padres, dónde se aclara que el madridista de cuna les dice y anima que denuncien al club para que pagase unos milloncejos que por ley deberían salir de sus bolsillos, de los de Casillas, quicir.
Joder que ridículo Carlos